Sandra Gallardo, atleta de la ciudad de Trelew, sufría de una úlcera que no le permitía llevar una vida normal. Tanto los dolores, como el estar acostumbrada a las prohibiciones -en cuanto a comida se refería-, fueron disminuyendo su calidad de vida.
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Nosotros le recomendamos consumir fibra y aloe beta, pero ella -en un principio- se mostró reticente a probar lo que no conocía. Fueron los testimonios que escuchó en nuestro Centro de Apoyo los que la ayudaron a tomar la decisión.
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Hoy, nos contó que tan solo un litro de Aloe Beta cambiaron su historia. ¿Y como se dio cuenta? Los dolores desaparecieron y se dio el gusto de comer 3 comidas consecutivas "de las prohibidas": pastas con tuco y pollo al disco... ¡y ninguna de ellas le produjo daño alguno!
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Esto nos dio el indicio que comenzó su recuperación... sin usar medicación a la que estaba acostumbrada consumir... solo a partir de la correcta nutrición...
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